Mostrando entradas con la etiqueta Consejos.. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Consejos.. Mostrar todas las entradas

miércoles, 6 de agosto de 2025

Miedos, estrés y reacciones inesperadas practicando la equitación.

Amig@s del caballo! Montar no es solo técnica y disciplina; también es una experiencia emocional profunda. Tanto el jinete como el caballo pueden experimentar miedo, estrés y comportamientos inesperados. Entender estas reacciones es clave para una equitación segura y en armonía con nuestros caballos.

En mi experiencia como profesor de equitación he comprobado que los factores siguientes influyen en nuestro desarrollo deportivo:

Miedos del jinete

  • Miedo a caer: Muy común tras una mala experiencia. Puede limitar el progreso y generar tensión en el cuerpo.
  • Miedo al galope o al salto: Surge por falta de control o confianza. Se supera con ejercicios progresivos y apoyo del instructor.
  • Miedo escénico en competición: La presión por hacerlo bien puede bloquear al jinete. La preparación mental es tan importante como la técnica.

Estrés en el caballo

  • Cambios de entorno: Un nuevo picadero, transporte o concurso puede alterar su comportamiento.
  • Exceso de exigencia: Un entrenamiento demasiado intenso o confuso puede generar frustración.
  • Falta de comprensión: Si el caballo no entiende lo que se le pide, puede reaccionar con resistencia o evasión.
  • Ambiente inadecuado: A los caballos jóvenes y en especial a los caballos de deporte, es bueno tenerlos sueltos en un potrero para evitar la acumulación de estrés. 

Reacciones inesperadas

  • Sustos repentinos: Un ruido, una sombra o un objeto nuevo puede provocar un bote o una huida.
  • Bloqueos o paradas: Algunos caballos se niegan a avanzar si sienten inseguridad o dolor.
  • Conductas agresivas: Mordiscos, patadas o giros bruscos pueden ser señales de incomodidad o miedo.

Cómo gestionar estas situaciones

  • Escucha activa: Observar al caballo y entender sus señales es fundamental.
  • Trabajo de confianza: Ejercicios en libertad, sesiones tranquilas y rutinas estables ayudan a crear vínculo.
  • Apoyo emocional al jinete: Técnicas de respiración, visualización y coaching ecuestre pueden marcar la diferencia.
  • Un entrenamiento adecuado: si quieres crecer, necesitas un entrenador que maneje bien todas las situaciones de las que hemos hablado en este artículo, con su experiencia te sentirás más seguro porque contaras con recursos para enfrentar diferentes problemas.

Reflexión personal

En mis clases, he visto cómo un jinete puede transformarse cuando aprende a escuchar a su caballo y a sí mismo. El miedo no desaparece por arte de magia, pero se puede convertir en respeto, en atención y en crecimiento. Y eso, al final, también lo siente el caballo. Por eso el 90% del éxito montando a caballo empieza con la confianza en uno mismo y la técnica adecuada para cada nivel del jinete y su caballo.


sábado, 7 de junio de 2025

Consejos para competición.


Amig@s del caballo! aquí en Europa estamos en primavera, el buen tiempo aumenta las fechas de competiciones y facilita el poder entrenar en el exterior. Hoy les comparto unos consejos para terminar con éxito un recorrido de salto. 

1. Preparación física y técnica: Tanto caballo como jinete devén estar en buena forma y haber practicado diferentes tipos de obstáculos antes de la competición.

2. Reconocimiento del recorrido: Antes de empezar, estudiar el trazado, analizar las distancias entre los saltos y planear la mejor ruta.

3. Ritmo y equilibrio: Mantén un ritmo constante y asegúrate de que tu caballo está equilibrado. Eviten aceleraciones bruscas o perder el control.

4. Uso adecuado de las ayudas: las piernas, manos y postura juegan un papel esencial. Hay que guiar al caballo con suavidad pero con firmeza.

5. Mirada y concentración: Una mirada hacia adelante y anticiparse a los movimientos. No fijar la vista en el obstáculo, sino en la siguiente acción.

6. Conexión con el caballo: La confianza es clave. Si tu caballo siente seguridad en ti, será más fácil que haga un recorrido fluido y preciso.

7. Práctica de combinaciones: Trabaja en casa con combinaciones de saltos para que tu caballo se acostumbre a diferentes situaciones.

8. Correcciones en el momento adecuado: Si sientes que algo va mal en el recorrido, ajusta sin perder el control ni la calma.

Evitar errores es clave para mejorar tu rendimiento y la seguridad de tu caballo. A continuación les comparto algunos de los fallos más comunes y cómo corregirlos:

1. Falta de estabilidad en la recepción: Aterrizar de manera inestable puede afectar el equilibrio del caballo. Mantener una postura firme y acompañar el movimiento es clave.

2. Mala posición del cuerpo al recibirse: Si te inclinas demasiado hacia adelante o hacia atrás, puedes desestabilizar a tu caballo. Debemos mantener el centro de gravedad alineado.

3. Falta de continuidad en el movimiento después del salto: Nunca hay que frenar bruscamente tras el obstáculo; hay que continuar con fluidez para mantener el ritmo.

4. Errores en el recorrido: Equivocarse en el orden de los saltos o en la dirección puede llevar a la eliminación en un concurso.

5. Desobediencia del caballo: Si tu caballo se niega a saltar, puede ser por falta de confianza o entrenamiento. Trabaja en la conexión y refuerza la técnica.

6. Sobrepasar el tiempo establecido: En competiciones, cada segundo cuenta. Mantén un ritmo adecuado sin apresurar demasiado a tu caballo.

Comparar tu técnica con la de otros jinetes puede ser una excelente manera de mejorar y ajustar tu entrenamiento. A continuación les doy algunos aspectos clave que pueden evaluar:

1. Equilibrio y postura: Los mejores jinetes mantienen una posición estable y alineada con el movimiento del caballo. Observa si tu postura es similar a la de los profesionales.

2. Ritmo y fluidez: Un recorrido exitoso debe ser fluido, sin interrupciones bruscas. Si sientes que tu caballo se detiene o pierde ritmo, podrías trabajar en mejorar la continuidad.

3. Uso de las ayudas: Los jinetes experimentados utilizan sus piernas, manos y peso corporal de manera precisa. Comparar cómo aplicas las ayudas con otros puede ayudarte a perfeccionar tu técnica.

4. Recepción después del salto: La manera en que aterrizas influye en la estabilidad del recorrido. Los profesionales suelen recibir con suavidad y mantener el impulso.

miércoles, 2 de abril de 2025

¿Cuándo podemos subir de altura?

Amig@s del caballo! seguro que les encantaría saltar un poco más alto con sus caballos. Es un objetivo que todos los propietarios de caballos nos proponemos cuando estos son aún jóvenes. Enseñar a un caballo a saltar más alto requiere paciencia, entrenamiento progresivo y una buena conexión entre el jinete y el caballo.

En este post les comparto algunas estrategias y consejos clave:

1. Condición física

- Fortalecimiento muscular: Un caballo necesita músculos fuertes para saltar. Puedes realizar ejercicios como trabajo en colinas o transiciones repetidas entre el trote y el galope.

- Flexibilidad: Ensaya con ejercicios de estiramiento y movimientos laterales como los apoyos que mantendrán al caballo ágil.

2. Técnica de salto

- Cruzadas bajas: Comienza con barras bajas y ejercicios simples para que el caballo gane confianza y perfeccione su técnica.

- Aumenta la dificultad gradualmente: Una vez que el caballo salte cómodamente, incrementa lentamente la altura de los obstáculos.

- Distancias correctas: Asegúrate de que las distancias entre los saltos sean las adecuadas para el tamaño del caballo y su nivel de habilidad.

3. Confianza y mentalidad

 - Evita el miedo: Nunca fuerces a un caballo a saltar alturas con las que no se sienta cómodo; podría desarrollar ansiedad o resistencia.

 - Recompensas: Premia al caballo después de completar un salto exitoso. El refuerzo positivo es crucial.

4. Postura y equilibrio

 - Equilibrio del jinete: Un jinete desbalanceado puede afectar el salto. Trabaja en tu posición y asegúrate de no cargar peso sobre las manos del caballo.

- Transiciones suaves: Antes del salto, mantén una aproximación recta y equilibrada.

5.Entrenamiento con un experto

- Considera trabajar con un entrenador profesional de salto. Ellos pueden identificar áreas para mejorar tu técnica y la del caballo y así crear un plan personalizado.

El proceso debe ser gradual y siempre respetando los límites del caballo. 

jueves, 6 de marzo de 2025

Como enseñar el paso atrás.


Amig@s del caballo! hoy les quiero compartir unos consejos para enseñar a un caballo a hacer el paso atrás, ejercicio muy útil en todas las disciplinas hípicas.
  1. Preparación y entorno:

    • Asegúrate de que tu caballo esté tranquilo y relajado antes de empezar.

    • Realiza el entrenamiento en un lugar seguro y sin distracciones.

  2. Iniciando el contacto:

    • Coloca al caballo en posición de descanso con las riendas sueltas.

    • Toma contacto suave con las riendas para establecer una comunicación ligera.

  3. Aplicar presión:

    • Mantén una presión constante y suave en las riendas, inclinándote ligeramente hacia atrás.

    • Usa tus piernas para mantener al caballo atento y en línea recta.

  4. Refuerza la respuesta:

    • Cuando el caballo dé un paso hacia atrás, libera la presión inmediatamente para recompensarlo.

    • Asegúrate de recompensar con voz suave y caricias para reforzar el comportamiento positivo.

  5. Repite y refuerza:

    • Repite el ejercicio varias veces, aumentando gradualmente el número de pasos hacia atrás.

    • Sé paciente y consistente, el caballo aprenderá mejor con repeticiones y recompensas constantes.

  6. Combinación de ayudas:

    • Una vez que el caballo entienda el ejercicio, combina el uso de las riendas y la presión de las piernas para afinar la respuesta.

    • Practica en diferentes situaciones y entornos para asegurar que el caballo responda correctamente en cualquier circunstancia.

Recuerda ser paciente y nunca usar fuerza excesiva. La clave está en la comunicación clara y en la comprensión mutua entre tú y tu caballo.

lunes, 10 de febrero de 2025

Introduciendo la reunión.

Amig@s del caballo! La reunión es una parte fundamental en el entrenamiento y la doma de caballos.

Es el resultado de años de trabajo siguiendo la escala de entrenamiento que encontramos en el reglamento de doma de la federación ecuestre internacional.

La reunión es necesaria tanto en la practica de la doma clásica como en el salto de obstáculos.

Hoy quiero compartir algunos pasos y consejos para introducir y mejorar la reunión en los caballos:

Pasos para Introducir la Reunión:

1. **Preparación Básica**:

   - Asegúrate de que el caballo esté bien trabajado en las bases de la doma. Debe responder bien a las ayudas y tener una buena flexibilidad y equilibrio.

2. **Trabajo en Transiciones**:

   - Trabaja en transiciones suaves entre diferentes marchas (paso, trote, galope). Las transiciones mejorarán el equilibrio y la obediencia del caballo.

3. **Incorporación de Ejercicios de Flexión**:

   - Utiliza ejercicios de flexión y ceder a la pierna para aumentar la flexibilidad del caballo. Ejemplos de ejercicios incluyen el círculo, la serpentina y los giros.

4. **Impulsión**:

   - Asegúrate de que el caballo tenga una buena impulsión desde los posteriores. La impulsión es clave para una buena reunión.

5. **Refuerzo del asiento y mejora del Contacto**:

   - Trabaja en mantener un contacto constante y suave con la boca del caballo, mientras refuerzas el asiento y las piernas. Usa ayudas precisas y consistentes.

6. **Incorporación de un galope más lento**:

   - Trabaja en galope lento, casi reunido, para mejorar la capacidad del caballo de mantener el equilibrio mientras reduce la velocidad.

Mejora de la Reunión

1. **Fortalecimiento Muscular**:

   - Trabaja en ejercicios que fortalezcan los músculos del dorso y los posteriores del caballo. Esto puede incluir trabajo subiendo laderas, barras de tranqueo y otros ejercicios de fortalecimiento de posteriores. 

2. **Variación de Ejercicios**:

   - Cambia y combina diferentes ejercicios para evitar la monotonía y mantener el interés del caballo. Ejemplos incluyen los cambios de mano frecuentes, trabajos laterales, y las piruetas al paso.

3. **Consistencia en las Ayudas**:

   - Asegúrate de que las ayudas sean claras y consistentes. La reunión requiere una comunicación precisa entre jinete y caballo.

4. **Relajación y Concentración**:

   - Trabaja en la relajación del caballo para evitar tensiones innecesarias. Un caballo relajado y concentrado responderá mejor a las ayudas de reunión.

5. **Sesiones Cortas y Frecuentes**:

   - Realiza sesiones de entrenamiento cortas y frecuentes para evitar el cansancio y mantener al caballo motivado. Es mejor trabajar en la reunión en varias sesiones breves que en una larga. 

Reunir no es tirar de la riendas, es utilizar la pierna junto con la media parada sin perder la impulsión este gesto técnico eleva el aire del caballo y hace que sea más hacia arriba en vez de hacia delante. 


jueves, 7 de noviembre de 2024

Introducción de los cambios de pie al galope en series.

Amig@s del caballo! Continuamos con esta serie de consejos para introducir los cambios de pie al galope en series.

Enseñar a un caballo a realizar series de cambios de pie al galope es un objetivo ambicioso que requiere paciencia, consistencia y una comprensión profunda de la equitación. Es un ejercicio que refina la coordinación, el equilibrio y la respuesta del caballo a las ayudas del jinete.

Fundamentos Antes de Empezar:

  • Base sólida: Asegúrate de que tu caballo tenga un galope seguro y equilibrado a ambas manos antes de comenzar.
  • Comunicación clara: Una comunicación efectiva con el caballo es esencial. Utiliza ayudas claras y consistentes para que el caballo entienda lo que se le pide.
  • Paciencia: Este es un proceso gradual. No presiones al caballo y celebra cada pequeño logro.

Pasos para Enseñar Series de Cambios de Pie:

  1. Dominar el cambio de pie simple: Antes de las series, asegúrate de que el caballo realice cambios de pie simples de manera confiable en respuesta a tus ayudas.
  2. Establecer un ritmo regular: Trabaja en mantener un ritmo constante en el galope antes de pedir los cambios.
  3. Introducir las series: Comienza pidiendo cambios cada cuatro o seis pasos. Gradualmente, reduce la distancia entre los cambios hasta alcanzar el objetivo deseado (cada dos pasos).
  4. Ayudas claras y consistentes:
    • Asiento: Mantén un asiento seguro y equilibrado.
    • Piernas: Utiliza una ligera presión de la pierna exterior detrás de la cincha para indicar el nuevo galope. La pierna interior se mantiene cerca de la cincha.
    • Manos: Las manos deben ser suaves y consistentes.
    • Voz: Puedes utilizar una palabra clave para indicar el cambio.
  5. Variar el lugar y el momento: Evita pedir los cambios siempre en el mismo lugar de la pista. Varía el lugar y el momento para que el caballo no se acostumbre a una rutina.
  6. Refuerza el comportamiento deseado: Premia al caballo con caricias y palabras de aliento cada vez que realice un cambio correcto.

Consejos Adicionales:

  • Relajación: Un caballo tenso tendrá dificultades para realizar los cambios. Trabaja en la relajación del caballo antes y durante el ejercicio.
  • Flexibilidad: El caballo debe ser flexible en ambas direcciones para poder realizar los cambios con facilidad.
  • Equilibrio: Un buen equilibrio del jinete es fundamental para transmitir las ayudas de manera clara y precisa.
  • Profesional: Si tienes dudas o encuentras dificultades, consulta a un instructor de equitación experimentado.

Recuerda: Cada caballo aprende a su propio ritmo. Sé paciente y disfruta del proceso de entrenamiento con tu caballo. 


miércoles, 2 de octubre de 2024

Caballos que no suben de nivel.

Amig@s del caballo! Muchas veces comienzas con mucha ilusión el adiestramiento de un caballo joven, a veces comienza todo de una forma muy fácil y eso te motiva mucho pero a veces por un error (o una serie de errores), por malas decisiones en determinados momentos, por falta de forma física, etc. nuestro caballo pierde confianza. Esto puede desembocar en que nuestro caballo no trabaje bien, pierda precisión, se pare en un obstáculo, etc.
Cuando un caballo pierde la confianza te sientes como que el caballo se resiste a subir de nivel. 
Si nos encontramos ante este problema, podemos afrontarlo siguiendo dos caminos diferentes. Por un lado, podemos empeñarnos en que nuestro caballo lo haga bajo presión y por el contrario, otra opción es la de pararnos y analizar las causas de esa falta de confianza. Si optamos por esto último, es bastante probable que nuestro caballo pueda recuperar la confianza de nuevo. Hablando por experiencia con los caballos, a veces es mejor hacer las cosas por las buenas, con paciencia y sobre todo amor. 

Cuando nuestro caballo tiene algún o algunos malos resultados, no siempre tenemos que pensar que sea por falta de confianza y que haya que pararse a pensar qué podemos estar haciendo mal en esa dirección. Probablemente es necesario analizar por qué se dan esos malos resultados, pero los motivos pueden ser otros distintos a la falta de confianza.

Voy a tomar un ejemplo que resulta fácil verlo y que en la disciplina de salto puede ser habitual que en algún momento de nuestra vida como jinetes nos encontremos en esa situación. Nuestro caballo se para frente a un salto (en una o en varias ocasiones). Muchas veces de este problema nos damos cuenta en competición, ya que resultamos eliminados (en una o en repetidas ocasiones). Aquí la falta de confianza puede darse en los saltos en general, en un tipo de salto (oxer, por ejemplo), en una combinación, etc.

Ante una situación como ésta, podemos ser insistentes y seguir haciendo lo mismo que hasta ese momento. Puede ocurrir que con esa medida nuestro caballo recupere la confianza y deje de pararse, pero no es frecuente que ocurra así. Otra actuación podría ser la de trabajar sobre los saltos en los que encontremos las dificultades. Por ejemplo, medidas como la de bajar la altura y si fuera necesario trabajar con distancias cómodas para nuestro caballo, pueden resultar determinantes para que recupere esa confianza. Si el problema lo encontramos principalmente en la competición, participar en pruebas de menor altura es bastante probable que ayude a que el caballo recupere la confianza.

En líneas generales, podemos pensar que para que nuestro caballo recupere confianza debemos hacérselo fácil, es decir, que las exigencias sean menores y que la dificultad vaya subiendo progresivamente. El tiempo necesario para recuperar esa confianza posiblemente nos lo vaya mostrando el caballo, pero tengamos en cuenta que las prisas puede que no resulten buenas compañeras.

lunes, 12 de agosto de 2024

Ejercicios de galope en trocado.


Amig@s del caballo! El galope en trocado también conocido como contra galope, es un ejercicio muy valioso para mejorar el galope y conseguir más reunión. Hoy les quiero compartir un ejercicio para iniciarse en ejercicios más complicados en trocado. Este ejercicio que les voy a describir se llama "bucles en trocado".
Imagínense al ejecutarlo alejarse y acercarse del lado largo de la pista haciendo un bucle, también lo podemos hacer después de un círculo en el lado corto partiendo por el lado largo en un bucle que nos separa del muro. 
Este ejercicio es adecuado para caballos que no tienen un entrenamiento formal en galope entrocado sin embargo necesitaremos una pista bastante grande. En una pista pequeña nuestro caballo no tendrá espacio para ejecutar el ejercicio de forma relajada y con una caja torácica oscilante. ¿Cómo realizarlo? 
Comenzaremos galopando a mano derecha, trazaremos algunos círculos en un extremo de la pista para establecer un ritmo claro y regular, al abandonar el círculo entraremos en la esquina e inmediatamente la dejaremos hacia el centro de la pista. Cuando nos encontremos a unos tres metros del muro, montaremos por derecho unos dos metros. El caballo debe tener rectitud, es la prueba de que está equilibrado. 
Volveremos hacia la pista antes de la siguiente esquina. En vez de trazar inmediatamente otro bucle seguiremos por la pista, esto ofrece a nuestro caballo la oportunidad de remeter sus posteriores bajo su masa con equilibrio antes de repetir el ejercicio. 
Practiquemos esta secuencia a ambas manos. 
Si nuestro caballo cambia su posición o su ritmo, trazaremos un bucle, incluso más suave o plano, hasta que se mueva sin fluctuaciones. Seremos precisos en los trazados, porque la diferencia en los tamaños de los bucles cargan los músculos posturales del caballo de manera distinta. 

jueves, 4 de julio de 2024

Trabajo fuera de pista.


Amig@s del caballo! Todos sabemos que el trabajo del caballo se complementa con paseos por el campo, incluso se puede trabajar al caballo fuera de la pista, independientemente de la disciplina que practiquemos, los consejos de este post son para potros destinados al salto. Los caballos jóvenes que obedezcan sin resistencias,  se les irá poco a poco, mejorando  su musculatura mediante ejercicios  en el exterior por el campo. Se les ejercitará gradualmente en subidas  de  pendientes que se encuentren por el campo, a medida que las fuerzas se vayan desarrollando,  subiendo  pendientes  ligeras,  calibrando  la  longitud de  ellas  con respecto a la velocidad  del aire que se  lleve. Si la pendiente es  corta y fuerte se subirá al galope procurando siempre llevar la mano hacia adelante,  fijando  el  cuerpo  para  ayudar  el  centro  de  gravedad,  haciendo  que vaya hacia  adelante y nunca hacia atrás ya que pesaría demasiado  sobre riñones y miembros posteriores, lo que podría ocasionar sobreesfuerzos innecesarios para los que el caballo no estuviera preparado. Del mismo modo que fortalecemos la musculatura y pulmón corazón del caballo  o  potro  subiendo,  podemos  fortalecer  el  equilibrio natural, bajando pendientes, también  poco a poco, sin forzar y  por la línea de máxima pendiente, en línea recta, sin  que se  desvíen  lateralmente, con  el peligro inminente de una caída o por atravesarse en la pendiente. Todos estos ejercicios se tienen que controlar por el jinete inteligentemente y sin  forzar, pues  no  nos  cansaremos  de  repetir que cualquier ejercicio será mejor si se queda corto en su intensidad, que si se pasa, pudiendo perjudicar tanto el físico como el psique. El caballo es animal muy sensible a los forzamientos de trabajo, pues repetimos que su gran memoria almacena los trabajos excesivos, produciéndole  miedos  y  malos  recuerdos  que  aflorarán  en  los  momentos  menos esperados, sin tener en cuenta la posibilidad de una lesión muscular o de tendones o articulaciones o vainas, etc. que se pueden manifestar claramente  o  llevar  ocultas  hasta  que por  un  aumento  de  esa  lesión,  se manifieste  y  no  sepamos  a  qué  es  debida.  Esto  es  común  en  jinetes  despreocupados,  que no  tienen un método  cotidiano  y creen que los  caballos son animales o bestias a las que hay que exprimir hasta el agotamiento. En los ejercicios por el campo, hemos mencionado  las subidas y bajadas dependientes y también diremos  que es muy conveniente el comenzar por pasar pequeños obstáculos, fosos, zanjas, arroyos, setos, matojos, etc. que hagan el trabajo sencillo  y agradable y sirva  para infundir ánimo  al caballo que su futuro es saltar lo que el jinete le ponga por delante, pero no se debe forzar a los caballos a que salten alturas grandes sin estar preparados, los grandes obstáculos vendrán «de la mano».

lunes, 6 de mayo de 2024

¿Cómo podemos mejorar nuestra equitación?


Amig@s del caballo! Hoy me gustaría compartir con todos ustedes las reglas que todo buen jinete debería tener en cuenta cuando comience el entrenamiento de un caballo.

La primera regla del buen jinete es mantener siempre la calma, sin ella el caballo no será capaz de entender nuestras ayudas y nosotros no seremos capaces de transmitirlas.
Un caballo no esta tranquilo cuando estímulos externos lo pueden alterar, un trabajo insuficiente unido a la falta de actividad y la sobre alimentación producen un caballo nervioso.
La segunda regla es la impulsión, la tendencia hacia delante es el alma de la equitación. Cuando esta presente, el caballo bien guiado por su jinete convierte la impulsión en un movimiento lleno de energía, soltura y fluidez sin precipitación, esta es la base sobre la cual se construye un trabajo bien hecho. Cuando hablo de precipitación quiero decir que el caballo lleva un ritmo demasiado rápido, desequilibrado sobre el tercio anterior corriendo por tensión o miedo.
La tercera regla es la rectitud, cuando un caballo va derecho cada pie sigue el mismo camino de la mano correspondiente, la columna vertebral y el cuello del caballo deben incurvarse con exactitud a la trayectoria curva de la figura ejecutada. La rectitud se consigue con ayudas correctas que el caballo aceptara con igual contacto a ambos lados, en estado de sostenimiento y en equilibrio dinámico en el que tanto los pares de piernas laterales como las diagonales soporten idéntica carga en todos los ejercicios, en una o en dos pistas.
Si seguimos estas reglas de la correcta equitación conseguiremos cumplir con los objetivos del caballo de doma, estos son: Ritmo, Relajación, Contacto, Rectitud, Impulsión, Reunión.
Recordar mis consejos: la transmisión desde los cuartos traseros viene desde atrás a través del dorso del caballo, trabajar bien el dorso del caballo, muscularlo bien antes de enseñarle trabajos más avanzados y cuidar bien el contacto con la boca, este debe ser siempre ligero y constante, de estos temas ya hablé en este blog y explique los ejercicios más acertados para cumplir con estos objetivos indispensables.

martes, 2 de abril de 2024

Como mejorar el trote.

Amig@s del caballo! cuando practicamos doma clásica, buscamos mejorar los aires naturales del caballo haciendo una gimnasia progresiva que flexibiliza y fortalece al caballo. 
Muchos caballos tienen un trote natural con mucha suspensión que facilita conseguir alargamientos espectaculares que puntúan muy alto en competición.
También podemos encontrarnos caballos con un trote "normal" que podemos mejorar haciendo ejercicios que le ayuden a liberar sus espaldas y encontrar un equilibrio más "desde atrás"
Pero primero debemos entender las diferencias entre trote de trabajo y trote medio, haciendo bien las transiciones entre estos dos aires podemos mejorar el trote y más adelante llegar al espectacular trote largo.

Trote de trabajo

Es un aire intermedio entre el trote reunido y el trote medio en el que un caballo que todavía no está entrenado ni a punto para los movimientos reunidos, presenta un buen equilibrio y, permaneciendo en la mano, avanza con trancos iguales y elásticos permaneciendo muy activas las caderas. La expresión "caderas activas" no significa que la reunión sea obligatoria en este aire. Simplemente subraya la importancia de la impulsión que viene de la actividad del tercio posterior.

Trote medio

Es un aire intermedio entre el trote de trabajo y el trote largo, pero más redondo que este último. El caballo avanza alargando moderadamente sus trancos y con una franca impulsión que procede del tercio posterior manteniendo en todo momento las mismas cualidades que en el trote de trabajo.

Mejorar el trote de tu caballo es un proceso que puede tener muchos beneficios tanto para el jinete como para el propio caballo. Un trote amplio y ascendente no solo es estéticamente agradable, sino que también contribuye al desarrollo muscular uniforme y la flexibilidad del caballo. Consejos útiles para lograr un trote más eficiente:

  1. Trote recogido y prolongado: Este ejercicio ayuda a que el caballo se siente debajo de sí mismo y active los posteriores para mejorar la potencia y el empuje. Comienza ralentizando el trote durante unos 10-15 metros y luego pide al caballo que extienda el tranco durante los siguientes 10-15 metros. Asegúrate de que el caballo no caiga sobre tu mano al reducir la velocidad, sino que pase por debajo de sí mismo y eleve el cuello.

  2. Alto al trote y pasos atrás: Otra forma excelente de mejorar la potencia de la grupa y conseguir que el caballo se mueva por todo el dorso es hacer transiciones trote/parada, parada/trote. Asegúrate de que el caballo no realice pasos intermedios. La progresión de este ejercicio sería realizar transiciones trote/parada con unos pocos pasos atrás y salida al trote.

  3. Transiciones trote de trabajo al trote medio y vuelta al trote de trabajo. Este ejercicio se puede hacer colocando dos series de barras de tranqueo en cada lado largo de la pista. La primera serie de barras seria para pasarlas a trote de trabajo y la siguiente, separadas para hacer trote medio.

  4. Posición del jinete: Alinear la pelvis, torso, hombros y cabeza es fundamental para mantener una posición de piernas bien alineadas con tu centro y acompañar el movimiento del caballo. Entender y seguir el movimiento del dorso del caballo al trote también es esencial. Deja que un lado de tu cadera suba y baje alternativamente con el movimiento del caballo.

  5. Contacto fluido y ligero: Al trotar, busca un contacto suave y estable entre la mano y la boca del caballo. Evita ir demasiado lento o “apagar” al caballo; en cambio, canaliza su energía de manera controlada.

Recuerda que mejorar el trote es un proceso gradual y constante.

¡Buena suerte en tu entrenamiento!

viernes, 1 de marzo de 2024

Consejos básicos para un concurso.

Amig@s del caballo! comienza la temporada de concursos de este nuevo año 2024, por ese motivo me gustaría compartir con ustedes una serie de consejos para jinetes de doma clásica.
El primero y más primordial es la organización, es decir, controlar todo lo que rodea al concurso en sí, porque con el estrés podemos olvidar algo. Para no olvidar nada o no tener sorpresas desagradables, tenemos que ir al concurso con todo bien preparado y  conociendo la hora aproximada de nuestra salida a pista. 
Debemos traer al concurso todo lo necesario porque hicimos una lista días antes y tener claro cuánto tiempo necesitamos para estar listos. 
Ejemplo: cuánto tiempo necesitamos para preparar el caballo, cuánto tardamos en vestirnos, cuanto tiempo dedicaremos al calentamiento. Entonces es muy importante tener un buen planning, una buena organización y llegar siempre con tiempo, hay que conseguir que todo lo que es ajeno al momento de entrar en pista no cree problemas que nos estresen. 
El segundo consejo es ir al concurso con la reprise muy entrenada, esta tiene que ser una prueba con la que el binomio se sienta cómodo. 
La prueba que hagamos no se puede convertir en un reto ni en un tener que terminar la reprise forzando al caballo.
Hay veces en las que tenemos mucha ilusión por salir en un nivel superior porque tenemos mucha motivación. Eso es fantástico, pero puede ser un inconveniente si no estás preparado, entonces se convierte en un reto tener que terminar la prueba. 
Es importante competir en un nivel que dominen jinete y caballo porque se tienen que concentrar en hacer la prueba ejercicio por ejercicio (es recomendable que en casa se hayan practicado los ejercicios del siguiente nivel) entonces en ese momento podemos dar el paso, pero darlo antes sin confirmar el nivel, puede salir mal y al final resultar en una desmotivación.
El tercer consejo es repasar bien la reprise, me refiero a que no se repase simplemente con el típico leer la prueba antes de hacerla: "entrada, parada en X salir al trote pisa mano derecha...", me refiero a que se repase la prueba ejercicio por ejercicio conforme a cómo la vamos a montar, como la vamos a ejecutar y qué ayudas técnicas vamos a necesitar.
Recordar lo qué os diga siempre vuestro entrenador: "...en esta esquina haz esto con la pierna... o aquí acuérdate de la transición". 
A esto me refiero con repasar bien la prueba, a repasarla de manera técnica y así cuando entremos en pista sentiremos como si lleváramos un walkie talkie en el oído escuchando al entrenador guiarte punto por punto como montabais entrenando en casa.
Muy importante también es para mí la primera impresión que damos a los jueces al entrar por la línea central: la parada, inmovilidad, el saludo... Creo que es muy importante practicarlo en casa, tiene que salir perfecto. No olvidemos que esto también es un ejercicio de la prueba, también tiene una nota y una importancia que al final, sí un binomio entra en pista haciendo una línea central perfecta, una parada con una inmovilidad, una calma, una tranquilidad y un salir disfrutando, da mucha armonía y buena impresión hay que cuidar esos pequeños detalles. Evidentemente después queda toda la prueba por delante y hay que cuidar el resto de detalles técnicos, las esquinas, el trazado, la impulsión... pero a veces nos olvidamos de algo tan simple como es hacer la línea central, la parada e inmovilidad, el saludo. Cuidar la entrada es dar una buena primera impresión a los jueces, tenerlo en cuenta siempre va a jugar a nuestro favor.
Y por último lo que siempre les digo a mis alumnos: la prueba la tienen que hacer sin prisa, no puede ser que entren en la prueba con prisa y la terminen sin saber cómo han trazado, ni los ejercicios que han hecho bien... Hacer la prueba rápido "de memoria" es un error y significa que no has montado con conciencia y que incluso no has disfrutado del concurso.
Tenemos que comenzar la prueba, pensar en cada ejercicio y mientras estás ejecutando el ejercicio, tener tiempo de pensar lo que vas a hacer para preparar el siguiente y así con toda la prueba.
No es solo cuidar los detalles como las esquinas, los círculos, es cuidar lo que te están exigiendo en cada ejercicio.
Las hojas de las reprises tienen unas indicaciones al lado que te especifican qué esperan los jueces ver en cada ejercicio. Esto hay que leérselo y si no se entiende, preguntárselo al entrenador para tenerlo en cuenta a la hora de ejecutar la prueba.

lunes, 2 de octubre de 2023

Cómo hacer el piaffe.


Amig@s del caballo! Me preguntan a menudo cómo enseñar el piaffe. Antes de abordar el piaffe es requisito previo que el caballo tenga bien desarrollada su capacidad autoportante, que no pese en la mano, y que permanezca flexible y relajado en cualquier requerimiento de ayudas. Yo procuro esperar a que el caballo sea tan ligero en la mano que lo pueda parar desde el trote solo utilizando mi espalda y asiento. Por regla general, el caballo habrá concluido satisfactoriamente el tiempo necesario de doma básica y estara bien avanzado en la doma de nivel medio. Es esencial que el caballo sea diestro en todos los trabajos en dos pistas y en los cambios de incurvación como muestra de su pericia para transformar diferentes posturas sin perturbación, en otras palabras tener desenvoltura en la flexibilidad lateral, en el traslado transversal de su peso y en el empuje individual de cada uno de los posteriores, todo lo necesario para mantener un depurado grado de rectitud, reunión y respuesta a las ayudas. Más importante aún, requiere haber desarrollado una gran impulsión y dominar las transiciones con elasticidad y soltura especialmente entrar a la parada y partir desde esta en cualquiera de los tres aires. Junto a la reunión, la movilización es una de las claves del piaffe, el caballo tiene que aprender a movilizarse con prontitud sin perder la reunión para lo que hay que practicar las transiciones trote- parada, parada-trote partiendo en actitud de reunión así como intercalar paso atrás para partir al trote con incremento de empuje y aumento de su peso sobre los posteriores. En todo momento, hay que prevenir la aparición de cualquier contracción. La tensión muscular producida por una falta de descontracción provoca en el caballo el deseo de escapar del ejercicio y nunca dará un movimiento que ofrezca la impresión que debe tener la belleza de una danza. La Práctica del Piaffe En principio se trata de conseguir trancos de trote lo más cortos posible sin que el caballo se pare. Al igual que todos los ejercicios que el caballo ha ido aprendiendo hasta ahora, para enseñar el piaffe no hay que ir siempre en una sola dirección, sino que hay que ensayar varias técnicas desde puntos diferentes de iniciación, y dependiendo de la habilidad de cada uno, será conveniente acentuar, que no forzar, la práctica del que resulte más dificultoso para el caballo y aprovechar lo que se manifiesta espontáneamente. En caballos que tienen facilidad para diagonalizar desde el paso, se puede reunir el paso y pedir trote reunido, siempre que exista una actitud de remetimiento de los posteriores, cuando los pies pisan cada vez más cerca de las manos. Las transiciones del trote a la parada, de la parada al trote, del trote a la parada y paso atrás, y del paso atrás al trote, se utilizan para que el caballo retroceda su centro de gravedad y aprenda a hacer trancos muy cortos, medios trancos. La entrada a la parada desde el trote se utiliza, bien para que el caballo bascule su peso añadidamente sobre los posteriores, o bien, para intercalar unos trancos de trote casi en el sitio antes de parar completamente. Salir al trote desde la parada se emplea para que el caballo aprenda realmente a empujar cuando los posteriores soportan más peso, o bien se aprovecha el empuje inicial de la salida para retener los primeros trancos y así conseguir algunas batidas casi en el sitio. 

Las transiciones desde o hacia parada, paso atrás y trote se emplean para conseguir pocos trancos muy cortos, para incrementar el peso sobre los posteriores y mejorar una actitud de reunión, o para crear mayor empuje de los posteriores. No hay que pensar que todo esto se produce simultáneamente. Lo más frecuente es que el caballo no sea capaz de conseguir más que uno de los elementos a la vez. Es normal que cuando los posteriores tienen que portar más peso, se pierda el movimiento, y viceversa, que se obtenga más acción cuando los posteriores se alivian del peso. Puesto que ambos, junto con la impulsión, son necesarios para la consecución del piaffe no hay que olvidarse de omitir ninguno de ellos, y para conseguirlo la forma más útil consiste en encadenar una sucesión de transiciones de parada, trote y paso atrás, con pocos trancos intercalados. El jinete tendrá que medir las aptitudes de su caballo y conformarse con lo que el caballo sea capaz de producir hasta que vaya adquiriendo la habilidad necesaria. Es importante tomar la precaución de parar antes de que el caballo pretenda hacerlo por sí mismo. En cuanto se percibe que el caballo pierde la facultad de mantener el intento de piaffe hay que sacarlo de ahí antes de que éste se apague. En estas transiciones, el jinete debe alternar las ayudas de empuje y detención, pasando de una a otra en cuanto la indicación empieza a tener efecto y antes de que este efecto se complete. Las ayudas deben ser momentáneas y discontinuas. No hay que aplicar al tiempo ayudas antagónicas y mucho menos mantener las ayudas aplicadas fijamente. La pierna empuja al caballo adelante, en cuanto avanza, el jinete le retiene por la acción de la rienda para restringir el avance, pero sin que se detenga por completo. Cuando el caballo empieza a dar signos de quedarse inmóvil, las piernas entran en acción. No hay que emocionarse por haber conseguido algún indicio de piaffe y aprovechar para intentar exprimírselo al caballo. Uno de los errores más frecuentes en el piaffe ocurre cuando el jinete intenta conseguir un resultado más rápido coartando el avance mediante la manipulación de las riendas y la restricción de cabeza y cuello. Algunos caballos meten mucho los pies y adoptan con facilidad la actitud de la reunión, pero al empujar se ponen al galope en el sitio en lugar de diagonalizar el trote. No es conveniente castigar esta iniciativa puesto que en realidad el caballo está dando más de lo que se le pide, y por lo general lo hace elevando el tercio anterior, una postura que es buena para el futuro piaffe. Hay que observar si el caballo mantiene la rectitud puesto que esto sucede con más frecuencia cuando el caballo se atraviesa aunque sólo sea un poco. Parar y volver a salir con ayudas menos enérgicas es la primera solución o en todo caso, empezar el acortamiento de trancos en espalda adentro. La ejecución del piaffe no debe suponer un incremento en la intensidad de las ayudas, más bien al contrario, la aplicación de éstas es menor gracias a la mejor obediencia y más pronta repuesta del caballo. El caballo llegará en ocasiones a hacer un par de trancos o más de trote en el sitio o casi en el sitio, aunque esto aún no sea un piaffe verdadero, sirve para que aprenda a adoptar una postura de reunión sin dejar de batir el trote. Por otro lado, no hay que perder de vista el ritmo, pues a la larga se trata de que el caballo ejecute un piaffe homogéneo y simétrico. Mientras que el caballo no sea todavía capaz de sostener un cierto número seguido de trancos de piaffe, para que no pierda el sentido del ritmo, es necesario practicar un trote lo más corto posible durante una cantidad prolongada de trancos, algo parecido a un piaffe andado. Todos los ejercicios pueden entrelazarse unos con otros, eligiendo en cada momento el más adecuado para mantener el equilibrio idóneo entre reunión, impulsión, disminución de avance, equilibrio, puesta en mano y ritmo. Después de algunos trancos satisfactorios hay que volver al alargamiento para recobrar la impulsión y el deseo de avanzar. Algunos caballos pierden con demasiada rapidez el deseo de avanzar y tienen tendencia de quedarse detrás de la mano en cuanto se les restringe la salida hacia delante, con este tipo de caballos hay que tener un tacto añadido y nunca coartarles el deseo de ir hacia delante.
Mejorar la Expresión Piaffe:
El piaffe consolidado tiene que tener una cadencia marcada, pero no hay que confundir la deseada cadencia con la ralentización del ritmo provocado por falta de impulsión o pérdida de actividad. El gesto del caballo en el piaffe, depende del grado de impulsión, de equilibrio y de reunión que es capaz de alcanzar. Para que el piaffe sea brillante el caballo tiene que adoptar una línea de impulsión ascendente. Cuanto más se reúna y redondee el caballo empujando, tendrá su centro de gravedad sobre los posteriores y tendrá más elevación del tercio anterior y por lo tanto más expresivo será el piaffe. Para asegurarse que el ejercicio final será brillante nunca ahí que dejar que el caballo aprenda a apagar su actividad durante su ejecución. Son mejores tres trancos muy activos que diez trancos apagados. Es más difícil recuperar la actividad perdida una vez que el caballo ha aprendido a no emplearse en el piaffe. La expresión del piaffe viene paulatinamente a medida que el caballo encuentra su sitio natural, desde ahí solo queda que el jinete le pida la reunión, le active la impulsión y le de la libertad de dejarle hacer.
Faltas Comunes en el Piaffe
El jinete tiene que ser consciente desde el inicio de la enseñanza del piaffe si el caballo tiene tendencia a adoptar una postura o acción que a la larga pueda perjudicar la brillantez del movimiento y modificarlo antes de que se haga habitual, pues es más fácil evitar los defectos que corregirlos después. El caballo que no eleva las manos es porque ha aprendido el piaffe en una posición que recarga las espaldas, bien por falta de actitud de reunión, bien por falta de impulsión. Esta falta también es común en caballos a los que se les ha enseñado el piaffe, pie a tierra utilizando en exceso el empleo de la vara en los pies, pues aprenden a levantar los pies mucho sin apenas tener actividad en las manos. Al contrario el caballo que apenas levanta los pies es porque se le ha recargado demasiado peso prematuramente sin esperar que se fortalezcan lo necesario. En ambos casos, es preciso volver atrás para que el caballo aprenda a entrar a los trancos cortos de trote sin caer en el defecto que se pretende evitar. Corregir o intentar obtener un piaffe a base de patadas y espuela, tirones en la boca y fustazos, puede que sirva para que el caballo haga algo parecido a un piaffe, pero al ser impuesto y forzado carecerá de soltura y elasticidad y no dará la apariencia de corrección y facilidad que debe tener.
Los defectos del jinete en el piaffe:
Traccionar de las riendas para retener el caballo e impedir el avance
Incrementar el contacto en lugar de aligerarlo
Comprimir el cuello de caballo
Obligar una colocación detrás de la vertical
Mantener el piaffe mediante contorsiones del cuerpo
Empujar el aire dando botes con el asiento
Abusar del empleo de las espuelas o la fusta
Los defectos del caballo en el piaffe:
Atravesarse al caballo o meter un pie más que el otro bajo la masa Balancearse, separando o cruzando los pies o las manos
Dejar los pies fuera de la masa Asimetría o irregularidad en el ritmo
Precipitación de trancos
Ausencia de suspensión o resorte en los trancos
Hundir el dorso o la cruz
Perder la colocación o invertir el cuello
Dejar caer las espaldas
Batir los pies casi juntos
Derrumbar el peso sobre el tercio anterior
Remeter las manos debajo del cuerpo detrás de la vertical
Elevar los pies más que las manos
Botar la grupa levantándola más que la cruz
Perder el resorte de las extremidades
No tener tiempo de suspensión

lunes, 11 de septiembre de 2023

Influye la morfología del caballo?


Amig@s del caballo! Muchas veces acuden a mí personas que llevan mucho tiempo montando a sus caballos y no logran ver resultados, es como si se quedaran en el mismo nivel.
Antes de empezar a entrenarles, primero examino la morfología del caballo, a simple vista puedes encontrar en su morfología los defectos físicos que impedirán la realización de ejercicios de máximo nivel.
Para que un entrenamiento sea efectivo, no es necesario seguir un método único.
Un buen entrenamiento es aquel que se adapta a la conformación particular de cada caballo y a sus características (caballos demasiado calientes, o fríos, muy sensibles, …etc.)
Para obtener resultados adecuados, debemos pensar en cada caballo como un atleta diferente, con sus puntos fuertes y sus puntos débiles, estos últimos son a los que debemos prestar más atención.
Los mejores caballos de doma que he conocido, por sus proporciones morfológicas podrían entrar dentro de la figura geométrica de un cuadrado, imagínense, tres lados iguales formados por dorso y extremidades delanteras y traseras, el cuarto lado sería la línea imaginaria formada por las distancia entre anteriores y posteriores sobre el suelo.
En este cuadrado imaginario no entraría la mayoría del cuello ni la cabeza, pues esta saldría del cuadrado imaginario que forma solo el cuerpo y las extremidades.
Actualmente es más fácil encontrar caballos que entrarían dentro de un rectángulo, más largos de dorso y cortos de extremidades.
En los caballos PRE también se da esta característica, he conocido caballos PRE cercanos morfológicamente hablando al patrón cuadrado, que demostraron su talento en la competición, actualmente la mayoría de caballos PRE que encontramos son más cercanos al suelo, pues tienen extremidades cortas porque también son más largos de dorso.
Esta característica empezó a darse a principios de los años 20 por recomendación de los veterinarios de la yeguada militar en los centros de reproducción del estado español.
Los veterinarios pensaban en aquella época que las yeguas largas de dorso y anchas de caja torácica tenían ventaja a la hora de gestar los potros en su vientre, ya que estos al tener un buen espacio, se desarrollarían con la ventaja de nacer más grandes y sin dificultades en el parto.
Entonces seleccionaron muchas yeguas destinadas a la cría con éstas características, entre otras.
Unos años después cambiaron ése criterio, pues el dorso largo es un defecto funcional y morfológico que se estaba haciendo muy común.
Esta decisión transformó el patrón racial de la raza que tenía en su comienzo el dorso menos largo y las extremidades más largas, actualmente en razas descendientes del caballo español como lo son el caballo lipizzano, o el lusitano podemos ver que esa característica se conserva aún en su morfología.
Morfológicamente un caballo es más eficaz en sus movimientos si no es tan largo como un rectángulo, ni tan corto como el patrón cuadrado.

Ventajas del patrón cercano al cuadrado:
• Facilidad para la reunión y elevación de sus anteriores, por lo tanto el trote es más cuesta arriba (los posteriores se meten más y desciende la grupa, elevando el tercio anterior) y extendido al alargarlo.
• El galope será más cuesta arriba y la sobre huella al paso será más fácil de conseguir.

Ventajas del patrón rectangular:
• Facilidad para andar de costado y para la incurvación.

Inconvenientes del patrón rectangular:
• Dorsos débiles
• Dificultad para la reunión
• En general trotes menos elevados
• Dificultad para alcanzar la sobre huella al paso

Inconvenientes del patrón cuadrado:
Aquí haré una apreciación más personal, pues la forma en la que se practica hoy la doma clásica, está pensada en el sistema de entrenamiento eficaz en los caballos de deporte modernos. A estos caballos en España les denominamos Centro Europeos y se caracterizan por un patrón más cercano al rectangular. Tienen la ventaja de poseer una musculatura fácil de desarrollar y su estructura esquelética suele ser fuerte, lo cual le facilita la extensión y la sobre huella en sus aires. Para la reunión no tienen tanta facilidad, por eso ahora es más común ver caballos de deporte más cercanos al patrón cuadrado.
El caballo PRE por naturaleza desarrolla con más lentitud su musculatura y su esqueleto, comparado con otras razas, a esto se le denomina desarrollo tardío, esta característica es natural en él por ser una raza pura, ya que no tiene en su genética la influencia de otras sangres que se distingan por un crecimiento más notable.
El caballo de deporte moderno si tiene esa influencia, pues es criado con el único objetivo de practicar deporte. El próximo mes les compartiré la conclusión de este artículo. 

domingo, 20 de agosto de 2023

Las medias paradas.


Amig@s del caballo! Les voy a hablar de las ayudas correctas para realizar con más exactitud la denominada media parada, ayuda tan importante en el adiestramiento de cualquier caballo.
La media parada como dice su nombre, es una ayuda breve de retención de la impulsión, esta ayuda se da para iniciar una transición, o para detener completamente al caballo.
Mis consejos:
Si nuestro caballo es muy sensible no apretaremos mucho las piernas, usaremos primero el asiento junto con la ayuda de tomar y ceder contacto con la rienda.
La media parada ayuda a aligerar el tercio anterior,  por ese motivo el asiento es fundamental.
Con un caballo frío es mejor utilizar la media parada después de haber impulsado y activar al caballo.
Con caballos con poca suspensión, utilizo más las piernas para subirlo y conseguir más elevación, apenas usó la mano y el peso.
Una media parada normal se debería hacer con las piernas el asiento del jinete y el tomar y ceder de riendas, son unas repeticiones de apenas un segundo de esta ayuda de retención.
Hay caballos muy atentos y sensibles, que solo con apretar la pierna o la rodilla ya van más lento.
Debemos ser delicados con nuestras ayudas para no alterar al caballo, a veces menos es más.
La media parada nos ayuda a equilibrar al caballo en los cambios de dirección.
También en los cambios de pié en el aire (volante) prepara al caballo para el cambio de galope.
Cuando tengamos el trote reunido bien definido, con medias paradas podemos llegar al piaffe.
Del galope al paso podemos llegar con medias paradas desde nuestro asiento y piernas.
Yo no entendería la equitación sin la media parada, por eso les ánimo a que las practiquen a menudo hasta que el caballo las entienda bien y consigan un buen efecto que aligere y de gracia al movimiento del caballo. 

jueves, 20 de julio de 2023

Consejos para el adiestramiento del caballo.


Amig@s del caballo! el primer consejo que les quiero darles, es para mí el más importante: debemos de conocer bien a nuestros caballos, debemos saber si están cómodos, sanos y con buena moral, también debemos de conocer su capacidad física, hacerlo trabajar fuerte cuando está cansado solo lo desmotivara y lo hará reacio a esforzarse más en un futuro.

Cada caballo es diferente, unos son verdaderos atletas y otros necesitan más paciencia para obtener de ellos el máximo rendimiento.
Por este motivo cada caballo necesitara una forma diferente de calentamiento y una forma diferente de aplicarle las ayudas, también necesitaran diferentes intensidades de esfuerzo a la hora de trabajar.
Cuando viajo a España a menudo me llaman de ganaderías en donde crían caballos ibéricos, allí aconsejo sobre el entrenamiento de los caballos y casí siempre me preguntan los dueños la misma pregunta: “¿Cuál es el problema de nuestro caballo, por qué no conseguimos que mejoren sus capacidades deportivas?”  Por desgracia les suelo contestar de la misma manera a todos: “el problema no lo tiene su caballo, el problema lo tiene su jinete que no hizo un buen trabajo de base y ahora repercute en su rendimiento.”
Muchos jinetes se saltan partes de la escala de entrenamiento, otros jinetes quieren avanzar y enseñarles cosas difíciles a sus caballos sin que estos estén lo suficientemente musculados y equilibrados, otros sobre esfuerzan al caballo buscando movimientos más espectaculares y lo que consiguen es lesionarlos. También hay jinetes que creen que por bajar la cabeza del caballo ya lo tienen en las ayudas, usan mucha mano y lo que consiguen es dañar al caballo negándole la impulsión.
En resumen, me he dado cuenta de que muchos criadores en su ignorancia de lo que es saber cómo trabaja un caballo de forma correcta, dejan sus caballos en manos de personas con una formación insuficiente. Este es un grave problema, una mala conducción de un caballo desde el comienzo de su adiestramiento termina por arruinar su vida deportiva, cuantas veces he visto buenos caballos ibéricos que han terminado su vida como caballos de paseo porque sus jinetes los apuraron y enseñaron trucos de feria que terminaron con las capacidades físicas y psíquicas del animal.
Con un buen trabajo de base, siguiendo la escala de formación FEI, el caballo mejorara sin sufrir tensiones y se podrá ir aumentando la dificultad de los ejercicios sin problemas más adelante.
Con los caballos brillantes, tendremos paciencia, trabajaremos sin prisa, con los caballos menos talentosos aun tendremos más paciencia y esperaremos resultados con más tiempo.
El primer problema que suelo encontrarme con los caballos mal entrenados es un mal contacto y mala conexión.
Si un caballo se esconde de la mano, lo empujaremos hacia delante y lo dejaremos con una mano suave que recobre la confianza, muchas transiciones con poca mano y mucha pierna nos ayudaran.
Si un caballo nos baja mucho la cabeza y se esconde, lo activaremos y no utilizaremos apenas la rienda exterior.
Si un caballo cabecea, nos indica tensión muscular excesiva, puede estar cansado e incluso sentir algún dolor.
Con la mano baja, dejando que el cuello se estire hacia delante y abajo junto a una pierna interior activa conseguiremos que se relaje y emplee bien el dorso.
Si un caballo es muy caliente y quiere correr, nosotros con el asiento marcaremos el ritmo adecuado, lento y con cadencia, una vez conseguido nos ponemos al paso y repetiremos buscando lo mismo, si sigue queriendo correr, lo montaremos en un círculo de 10 metros y con el asiento y la pierna para retener lo llevaremos más lento y ordenado.
Después de cada esfuerzo haremos una pausa al paso, haremos esfuerzos con el caballo en repeticiones breves y efectivas seguidas de pausas. No hay que prolongar demasiado los ejercicios y no hay que trabajar en el mismo ritmo todo el tiempo, eso aburre al caballo, hay que trabajar mucho en las transiciones y montaremos tanto en ritmos lentos como en más crecientes, en aires de trabajo, medios y largos.
Si tenemos un caballo con poca impulsión dejaremos las manos quietas y buscaremos más energía sin acortar el cuello, siempre es mejor un cuello estirado hacia el filete, un perfil largo que busque el contacto con la nariz a la altura del pecho.
El 90% del éxito montando a caballo es nuestro asiento, el 10% sería la eficacia de nuestras ayudas, la experiencia y una buena técnica. Trabajemos el asiento correcto, hay que darle mucha importancia, pidan ayuda a un amigo, que este los corrija o les sujete el caballo a la cuerda y los ayude a montar sin estribos ni riendas.