martes, 10 de enero de 2023

Como recuperar la condición física después de un descanso.


Amig@s de caballo! comienza un año nuevo y seguro que muchos de ustedes quieren iniciar su temporada de competición. Hoy les quiero compartir una tabla de entrenamiento para poner en forma sus caballos. 

Esta tabla es útil para caballos que regresen al trabajo después de un descanso, o  para aquellos que estén buscando aumentar su ejercicio teniendo en cuenta los concursos, es fundamental que nuestros caballos estén en forma para el nivel de trabajo que hará durante este año que comienza para ayudar a minimizar la probabilidad de lesiones.

La aptitud física debe trabajarse gradualmente durante un período de semanas para permitir que el cuerpo del caballo se ajuste a los cambios en el nivel de ejercicio. No hay atajos, ya que los aumentos repentinos en el trabajo pueden resultar en músculos forzados y lesiones. Evitemos forzar a los caballos.

La salud general de un caballo debe revisarse antes de comenzar cualquier trabajo de acondicionamiento físico, sobre todo si está comenzando desde cero, así que asegúrense de que su caballo esté listo para comenzar a trabajar organizando las vacunas, los controles odontológicos, el herrado y la desparasitación según sea necesario. Aún deben asegurarse de que sus caballos estén sanos después de un breve descanso o una ligera reducción en la carga de trabajo debido a las vacaciones navideñas.

Este plan de recuperación física me encanta porque esta basado en mucho trabajo en el exterior, el trabajo fuera de la pista estimula al caballo y lo vuelve menos asustadizo.

Este plan de trabajo sirve para caballos de salto y concurso completo. Para caballos de adiestramiento (Dressage) es también muy positivo pero si su caballo no salta, en la  séptima semana introdúzcale ejercicios que le exijan más reunión, y en la ultima semana introduzca ejercicios relacionados con el galope como series de cambios de pie.

Cada caballo es un individuo y el período de tiempo requerido para obtener un caballo en forma estará influenciado por:

  • La edad del caballo: los caballos veteranos y los caballos muy jóvenes tardarán más en ponerse en forma que los que están en su mejor momento.
  • Qué tan en forma está el caballo ahora: un caballo que se ha mantenido en marcha estará más en forma que uno que ha tenido unas vacaciones de campo sin ejercicio.
  • Cualquier lesión: un caballo regresa al trabajo después de un tiempo libre con una lesión necesitará muchas semanas de trabajo lento para garantizar que no se aplique demasiada presión a la parte lesionada.
  • Duración del descanso: por ejemplo, un caballo que está acostumbrado a descansar durante el invierno y es traído de vuelta en la primavera, estará en forma más rápido que un caballo que se pone en forma por primera vez este año.

La mayoría de los programas de acondicionamiento físico se pueden dividir en tres etapas:

  • Etapa 1 – Trabajo lento para preparar los músculos, tendones y ligamentos del cuerpo.
  • Etapa 2 – Trabajar para mejorar la fuerza y la resistencia y la aptitud física básica.
  • Etapa 3: trabajo más rápido para preparar la resistencia que necesita un caballo de competición.

Al completar las tres etapas, su caballo estará en condiciones de competir regularmente en una variedad de disciplinas cuando se reinicien.

Un programa de gimnástico para vuestros caballos:

El programa de acondicionamiento físico que se expone a continuación atiende a un caballo que se ha mantenido realizando un ejercicio suave y cuyo jinete tiene la intención de competir regularmente en competiciones de nivel básico.

El caballo debe tener un día libre por semana, con tiempo en el campo para estirarse y relajarse.

Semana 1 - Alrededor de 20 minutos de trabajo al paso caminando por el campo.

Semana 2 – Aumentar el trabajo vial a 30-40 minutos por día, subiendo y bajando laderas suaves.

Semana 3 – Aumentar el trabajo vial a 60 minutos por día, incluyendo el subir algunas cuestas más pronunciadas.

Semana 4: extienda el tiempo en el campo con hasta 90 minutos por día (puede ser en dos viajes separados), incluyendo un poco de trabajo de trote en un terreno adecuado.

Semana 5 – Comenzamos a introducir una equitación suave en la pista (20-30 minutos como máximo). 

Semana 6 – Aumente gradualmente el tiempo dedicado a la instrucción del caballo o a recordar ejercicios. El tiempo de trabajo se puede aumentar a 1 hora.

Semana 7 – dedicaremos un tiempo especial al galope cuando paseamos por el campo, incluyendo algunos galopes cuesta arriba. Continuar con el adiestramiento en la pista, empezamos a introducir saltos fáciles.

Semana 8-9 – Continúanos con el trabajo de la semana 7 e introducimos un trabajo más rápido (galope largo, pero galope controlado) en un formato de entrenamiento continuo o de intervalos. A partir de este momento podemos saltar combinaciones más exigentes con el nivel del caballo.

A partir de la semana 9 veremos como nuestro caballo esta preparado para superar con éxito su rutina de esfuerzo diario antes del descanso y estará listo para continuar su entrenamiento basado en la superación de pruebas de salto de un nivel medio.

viernes, 2 de diciembre de 2022

Consejos para el adiestramiento del caballo.


Amig@s del caballo! El consejo que considero más importante es: conocer bien a nuestros caballos, debemos saber si están cómodos, sanos y con buena moral, también debemos de conocer su capacidad física, hacerlo trabajar fuerte cuando está cansado solo lo desmotivara y lo hará reacio a esforzarse más en un futuro.

Cada caballo es diferente, unos son verdaderos atletas y otros necesitan más paciencia para obtener de ellos el máximo rendimiento.
Por este motivo cada caballo necesitara una forma diferente de calentamiento y una forma diferente de aplicarle las ayudas, también necesitaran diferentes intensidades de esfuerzo a la hora de trabajar.
Cuando visito los criaderos de caballos de América Central donde crían caballos ibéricos, les aconsejo sobre el entrenamiento de los caballos y casí siempre me hacen la misma pregunta: “¿Cuál es el problema de nuestro caballo, por qué no conseguimos que mejoren sus capacidades deportivas?”  Por desgracia les suelo contestar de la misma manera a todos: “el problema no lo tiene su caballo, el problema lo tiene su jinete que no hizo un buen trabajo de base y ahora repercute en su rendimiento.”
Muchos jinetes se saltan partes de la escala de entrenamiento, otros jinetes quieren avanzar y enseñarles cosas difíciles a sus caballos sin que estos estén lo suficientemente musculados y equilibrados, otros sobre esfuerzan al caballo buscando movimientos más espectaculares y lo que consiguen es lesionarlos. También hay jinetes que creen que por bajar la cabeza del caballo ya lo tienen en las ayudas, usan mucha mano y lo que consiguen es dañar al caballo negándole la impulsión.
En resumen, me he dado cuenta de que muchos criadores en su ignorancia de lo que es saber cómo trabaja un caballo de forma correcta, dejan sus caballos en manos de personas con una formación insuficiente. Este es un grave problema, una mala conducción de un caballo desde el comienzo de su adiestramiento termina por arruinar su vida deportiva, cuantas veces he visto buenos caballos ibéricos que han terminado su vida como caballos de paseo porque sus jinetes los apuraron y enseñaron trucos de feria que terminaron con las capacidades físicas y psíquicas del animal.
Con un buen trabajo de base, siguiendo la escala de formación FEI, el caballo mejorara sin sufrir tensiones y se podrá ir aumentando la dificultad de los ejercicios sin problemas más adelante.
Con los caballos brillantes, tendremos paciencia, trabajaremos sin prisa, con los caballos menos talentosos aun tendremos más paciencia y esperaremos resultados con más tiempo.
El primer problema que suelo encontrarme con los caballos mal entrenados es un mal contacto y mala conexión.
Si un caballo se esconde de la mano, lo empujaremos hacia delante y lo dejaremos con una mano suave que recobre la confianza, muchas transiciones con poca mano y mucha pierna nos ayudaran.
Si un caballo nos baja mucho la cabeza y se esconde, lo activaremos y no utilizaremos apenas la rienda exterior.
Si un caballo cabecea, nos indica tensión muscular excesiva, puede estar cansado e incluso sentir algún dolor.
Con la mano baja, dejando que el cuello se estire hacia delante y abajo junto a una pierna interior activa conseguiremos que se relaje y emplee bien el dorso.
Si un caballo es muy caliente y quiere correr, nosotros con el asiento marcaremos el ritmo adecuado, lento y con cadencia, una vez conseguido nos ponemos al paso y repetiremos buscando lo mismo, si sigue queriendo correr, lo montaremos en un círculo de 10 metros y con el asiento y la pierna para retener lo llevaremos más lento y ordenado.
Despues de cada esfuerzo haremos una pausa al paso, haremos esfuerzos con el caballo en repeticiones breves y efectivas seguidas de pausas. No hay que prolongar demasiado los ejercicios y no hay que trabajar en el mismo ritmo todo el tiempo, eso aburre al caballo, hay que trabajar mucho en las transiciones y montaremos tanto en ritmos lentos como en más crecientes, en aires de trabajo, medios y largos.
Si tenemos un caballo con poca impulsión dejaremos las manos quietas y buscaremos más energía sin acortar el cuello, siempre es mejor un cuello estirado hacia el filete, un perfil largo que busque el contacto con la nariz a la altura del pecho.
El 90% del éxito montando a caballo es nuestro asiento, el 10% sería la eficacia de nuestras ayudas, la experiencia y una buena técnica. Trabajemos el asiento correcto, hay que darle mucha importancia, pidan ayuda a un amigo, que este los corrija o les sujete el caballo a la cuerda y los ayude a montar sin estribos ni riendas.

viernes, 4 de noviembre de 2022

Consejos para concursos de adiestramiento (parte 8).


Amig@s del caballo! en este post terminamos con la serie de consejos para competir en adiestramiento, hoy les doy el último consejo: como establecer equilibrio para lograr la armonía.

Armonía es una palabra que encontramos en todas las pruebas de doma, pero muchos jinetes encuentran que esta es una cualidad difícil de alcanzar. La armonía solo se puede lograr cuando el caballo está equilibrado y cómodo y el jinete ha desarrollado la capacidad de dar ayudas claras y efectivas. Es una reunión de mentes, un entendimiento mutuo de que el jinete es el líder y moverá el cuerpo del caballo de una manera que maximice su comodidad y libertad de movimiento. Para facilitar esto, el caballo debe confiar y comprender las señales del jinete para que quede suspendido entre sus ayudas silenciosas y precisas. Un par que está conectado de esta manera parece como si se estuvieran moviendo como uno solo. Es la última representación del equilibrio y el acto de doma de alto nivel.

La armonía no ocurre de la noche a la mañana. El equilibrio debe ser construido y probado y en el camino, el caballo y el jinete deben salir de su zona de confort.

Consejo:

No debemos evitar manipular el cuerpo del caballo, ya sea a través de cambios frecuentes de dirección o moviéndose entre diferentes tipos de trabajo lateral o cambiando la longitud del marco y la zancada. Este trabajo enseña al caballo a estar atento al jinete y mejora su equilibrio.

Pasar barras de tranqueo al trote y al galope, subir cuestas y bajar cuestas en nuestros paseos por el campo, (siempre con ayudas suaves) nos ayudaran a conseguirlo.

Si en nuestro trabajo diario conseguimos ligereza y ayudas refinadas vamos por buen camino. Nunca debe parecer forzado el trabajo diario. Sólo cuando el caballo está equilibrado entre todas las ayudas es posible la armonía.